El hotel ofrece un desayuno a la carta muy variado que me encantó.

La iluminación en la habitación era muy tenue, lo que dificultaba un poco prepararme para salir.

El hotel tiene una ubicación excepcional, muy cerca de las principales atracciones del centro, como la ópera y el Parlamento. Las habitaciones son cómodas, con una mezcla perfecta entre firmeza y confort. Además, el personal es muy amable y siempre dispuesto a ayudar, haciendo que la estancia sea más agradable.

No hay ascensor, lo que puede ser incómodo al subir con maletas, especialmente si se viaja con niños.

Desayuno en una cafetería encantadora

El desayuno en una cafetería cercana fue un deleite, con muchas opciones deliciosas para elegir. Además, la limpieza diaria y la amabilidad del personal hicieron que la estancia fuese realmente placentera.

Sin embargo, la falta de ascensor fue un inconveniente, ya que tuve que cargar con las maletas por las escaleras, lo que puede ser complicado después de un largo día de turismo.

Recomiendo para viajeros que buscan comodidad

La atención de la gente era increíble, como cuando me ayudaron a conseguir información sobre los mejores lugares para visitar. La habitación, además de ser bastante espaciosa, estaba decorada de una manera única que realmente hacía sentir bien estar allí.

No era barato, pero aceptable.

Me encantó mi estancia. La habitación era perfecta, limpia y bien decorada. 🛌 El desayuno, con opciones deliciosas, fue un gran bonus. Solo una cosa, las escaleras pueden ser un lío si llevas maletas.

La habitación era cómoda, pero la iluminación era pésima para maquillarse.

experiencia inolvidable con un desayuno increíble y un servicio amable del personal

Este hotel es simplemente excepcional. Su ubicación central permite acceder fácilmente a todas las atracciones. Las habitaciones son modernas, están impecables y cuentan con una cama increíblemente cómoda. Además, el personal es tan acogedor y siempre dispuesto a ayudar. El desayuno, servido en un encantador café cercano, ofrece muchas opciones deliciosas y es un gran inicio para el día. Sin duda, una experiencia que no se puede dejar pasar.

La habitación era cómoda, con una decoración bonita y un ambiente tranquilo. La limpieza diaria era genial, siempre con sábanas frescas y toallas limpias. Me encantó que tuviera minibar y opciones de café. Aunque su falta de ascensor era un poco incómoda, el tamaño de la habitación lo compensó. Además, me gustó mucho que el hotel estaba estratégico para salir a pasear o comer algo rico por la zona.

El lugar es encantador, con habitaciones perfectamente limpias y elegantes. Muy central, así que estar cerca del metro y de zonas con ambiente es un lujo.

Cuidado con las escaleras, pueden convertirse en una aventura!

una estancia agradable pero con algunos inconvenientes

El personal fue excepcionalmente amable, siempre atento a lo que pudiéramos necesitar. La habitación era espaciosa y estaba bien decorada, creando un ambiente acogedor. Además, la ubicación es muy buena, cerca de zonas con ambiente y fácil acceso al metro.

Sin embargo, la falta de ascensor puede dificultar la experiencia para quienes llevan maletas pesadas.

la habitación tenía una iluminación excelente y decoración agradable. el ruido de los vecinos fue un inconveniente.

La habitación era espaciosa y estaba bien decorada, con detalles que la hacían muy acogedora. La limpieza diaria fue excelente, siempre con sábanas y toallas frescas. La ubicación, cerca de la línea 3 de metro, facilitó mucho los traslados. Además, el desayuno en la cafetería cercana tenía una variedad estupenda, con opciones deliciosas para todos los gustos.

No hay ascensor, lo que dificulta cargar maletas.

El hotel está ubicado en el corazón de la ciudad, permitiendo un fácil acceso a varias atracciones turísticas. Las habitaciones son elegantes y cómodas, lo que hizo que el ambiente fuera muy acogedor. Sin embargo, los ruidos de la calle eran notables y podría ser un inconveniente para algunos. En general, una experiencia valiosa.

Excelente ubicación y confort

La habitación era muy cómoda y bien decorada, perfecta para descansar después de un día de turismo. El bar del hotel tenía un ambiente chill donde relajarse. Aunque no tiene ascensor, lo cual es un poco incómodo, valió la pena por la atención tan cercana del personal. Sin duda, haría otra parada por ahí.

La habitación Superior Doble ofrece una mezcla interesante de comodidad y estética. La decoración es única, lo que crea un ambiente acogedor perfecto para pasar un buen rato.

Sin embargo, el hotel no tiene ascensor, lo que puede ser un desafío, especialmente al subir a la segunda planta con maletas. La iluminación en las habitaciones es bastante tenue, lo que dificulta actividades como maquillarse, obligándote a usar una linterna del móvil. Aunque el ruido de la calle no es abrumador, se aprecian pequeños detalles como los tapones para los oídos que se ofrecen para mayor comodidad.